
El presidente de la Asamblea Nacional (AN), Jorge Rodríguez, anunció hoy que el próximo viernes 1 de marzo, una delegación de la AN se dirigirá al Consejo Nacional Electoral (CNE) para entregar un documento crucial: las propuestas de fechas para las elecciones presidenciales.
El consenso nacional y las 27 propuestas
En un acto celebrado en el salón elíptico del Palacio Federal, Rodríguez reveló que más de 27 propuestas de fechas fueron debatidas y elevadas durante intensas mesas de trabajo. Estas propuestas, provenientes de diversos sectores sociales, políticos, empresariales, educativos y culturales, han sido recopiladas en el documento de consenso nacional. El objetivo es garantizar que todos los ciudadanos se sientan representados y atendidos en este proceso electoral trascendental.
¿Quién decide la fecha?
El presidente de la AN enfatizó que, aunque la Asamblea Nacional proporcionó insumos valiosos, la decisión final sobre la fecha de las elecciones presidenciales recae en el CNE. “Nosotros le dimos fue insumos. Tenemos 27 fechas. Vamos al CNE el próximo viernes”, afirmó Rodríguez. Esta aclaración es fundamental para comprender que el proceso democrático está en manos de la autoridad electoral.
Garantías y diálogo permanente
El documento también aborda otros aspectos cruciales, como principios generales de la elección presidencial y garantías electorales. Se insiste en la necesidad de respetar la independencia de las instituciones y realizar todas las auditorías pertinentes. Además, se busca igualdad de acceso a los medios y redes sociales durante la campaña electoral.
Rodríguez destacó la importancia de esta jornada de diálogo y anunció que se mantendrá de forma permanente para abordar no solo temas electorales, sino también otros asuntos relevantes para el país.
Fortalecer la confianza en el proceso electoral
La entrega de estas propuestas al CNE marca un hito en el camino hacia las elecciones presidenciales. La sociedad venezolana espera con expectación la decisión final sobre la fecha de los comicios. La transparencia y la participación activa de diversos sectores son esenciales para fortalecer la confianza en el proceso electoral.