Érase una vez en Andorra
Una historia de ficción que agujereó la mente de la opinión pública mundial

Érase, es el inicio de muchos cuentos de ficción, y en este caso, nos referimos a uno que instruyó un diario español, desde hace 5 años en Andorra. Una pequeña comunidad autonómica y paraíso fiscal de España.
En este cuento, no hay mucha magia, pero sí, mucha ficción. Andorra está y estará en el centro de la diatriba en Diario El País. Que busca las suscripciones a punta de inventarse historias, no importando quien salga herido.
Pero son Andorra y Venezuela, sus centros de atención. Y de las que publica, al menos una novela de ficción a diario. Usando como marca personal, su gran creatividad y la posverdad.
Para quien no sepan de esto, la posverdad, esta táctica digital, se trata de escribir una ficción o mentira, que luego será desmentida por los aludidos. Y para el País, los temas de Andorra o Venezuela, se utilizan, para llamar la atención o desviar el foco de un hecho más amplio.
Los casos BPA (Banca Privada de Andorra), PDVSA, Panamá Papers, y otros más, son mezclados por el País, y trampeados entre ellos. Por lo que, no se sabe de verdad, donde comienza una mentira o donde va a parar.

Una historia sobre Andorra, que no podrá creer, ¡Porque es falsa!
Pero en todos los casos, el diario, creó un laberinto escandaloso que terminó en primeras, destruyendo la reputación de mucha gente. Todo a través de falsas verdades y absurdas pruebas, imposibles de corroborar, con las que dan credibilidad a lo insostenible.
Cierto es que este tipo de historias de ficción, ganan muchos adeptos. Sobre todo, cuando se habla de Andorra o Venezuela. Pero finalmente, las personas que se señalan, si existen y los daños que causan, son reales y afectan a muchos inocentes.
Los métodos son conocidos, señalar fuentes imprecisas; hablar de investigaciones inexistentes; o señalar pruebas imposibles de corroborar o que, a todas luces, son forjadas.
Esta semana, volvieron a salir a la palestra a través de la prensa un nuevo señalamiento sobre la banca privada de Andorra, su ficción más recurrente. Y en esta ocasión, descargó todo su ingenio en la creación fantástica, sobre varios venezolanos exfuncionarios de PDVSA.
Las historias sobre Andorra y PDVSA, son las que más venden
Esta nueva ficción creada por este diario, parte del supuesto negado, de un solo documento. Un documento mágico a través del que ellos, determinaron una serie infinita de movimientos entre supuestas cuentas opacas e inexistentes, para dar cuerpo a su noticia.
Es cierto que hubo una investigación en Andorra, pero de ella, ya se determinó, que el señalado, Eudomario Carruyo, no tiene vinculación alguna.
Este señor, no posee, ni poseyó, cuentas en la Banca privada de Andorra, por lo que todo el laberinto, se cae como un castillo de cartas. Por su poca seriedad y rigurosidad al mostrar pruebas tangibles y esconderse en suposiciones y frases hechas.
Más allá de lo que ya se ha negado, y tras un trabajo de investigación. No se logró encontrar, ninguna relación probada, sobre la participación de Carruyo, en las empresas señaladas por El País. Ni por asociación, ni por relación comercial. A pesar de que muchas de ellas, presentan datos públicos en la internet y son sencillas de corroborar.
Po otra parte, parece haber una inquietante y morbosa necesidad de El País, por lograr enredar a Carruyo, dentro de esta novela de ficción que se crearon. Hasta llegar al punto de forzarla, a través de la fotocopia, de un documento, forjado a mano, sin sellos, ni encabezado, ni firmas, que lo hagan verificable y del que nadie afirma paternidad.
Y aún más relevante, es el hecho, según se ha investigado, de que no hubo ninguna declaración de algún familiar de Carruyo, como afirma El País. Declaración jurada, que no existe, ni en Andorra, ni en Venezuela, Panamá o EE.UU., por lo que, el resto de la información, no tiene asidero real.
Ahora bien, existen muchos detalles que señalar en el artículo de El País. Existen grabaciones que comprueban los contratos orales; Hay manera de demostrar las supuestas asesorías de Carruyo; Ya pensaron cual es la manera de forjar las transferencias a cuentas que no existen en ningún universo conocido.
El País, afirma haber tenido acceso a papeles, que seguramente, no van a mostrar nunca, porque no existen. Al igual que muchas aseveraciones de muchas de sus investigaciones, que sólo buscan más suscriptores, como cualquier novela de la hora premium.
Como pasa en muchas de las falsas investigaciones del Diario El País, o dentro de las novelas de ficción y aventura. Son respuestas que nunca se van a conocer.
Venezuela, mientras, si abrió una investigación seria, para aclarar las implicaciones de algún funcionario de PDVSA, dentro de la investigación en Andorra. Pero, esto se determinó hace varios años y los culpables ya fueron señalados.
Y por su parte, Andorra, también realizó su propia investigación. De la que se señaló al parecer, a los mismos, culpables y con las mismas consecuencias.
Sólo se debe esperar, que gente seria, termine alguna vez con estas indagatorias y finalmente y con pruebas verdaderas en las manos, demuestren la culpabilidad de los que son culpables.
Pero que exculpe de una vez por todas a los inocentes. Como el verdadero buen periodismo lo hace con las historias reales. Por lo pronto la ficción se la dejamos a los cuenta cuentos y al Diario El País.