Idalia se alimentó del calentamiento
El cambio climático está alimentando con energía y fuerza a huracanes como Idalia en Florida y otros fenómenos ambientales

Científicos afirman que el cambio climático contribulle a la intensidad de los huracanes, impulsando vientos más fuertes y tormentas más húmedas.
En menos de un día esta semana, el huracán Idalia se fortaleció por calentamiento de una tormenta de categoría 1 a una feroz categoría 4, el segundo nivel más alto para los ciclones.
Finalmente tocó tierra en la Florida como una poderosa tormenta de categoría 3, el umbral para un «huracán mayor». El calentamiento, llevó velocidades de viento de aproximadamente 193 kilómetros por hora.
Con la temporada de huracanes del Atlántico entrando en sus meses pico, expertos afirman que Idalia es una señal de lo que está por venir. Mientras el cambio climático sobrecarga los eventos climáticos severos.

Idalia, es el tercer huracán con nombre de la temporada, reforzada por el calentamiento del Atlántico
A partir del viernes por la mañana, estará a 295 kilómetros al oeste del territorio británico de Bermudas, con vientos máximos sostenidos de aproximadamente 95 km / h. Se espera que la isla reciba entre 75 y 125 milímetros de lluvia hasta el domingo, con el potencial de inundaciones repentinas.
Pero la destrucción que Idalia causó a su paso por el sur de los Estados Unidos determinó que los científicos reajusten sus expectativas para la temporada de huracanes de 2023.
Lo que inicialmente creían que sería una temporada de huracanes relativamente suave ahora se proyecta que tendrá una actividad de tormentas más extrema.
El huracán Idalia barrió el sur de la Florida en las primeras horas del miércoles, desatando fuertes vientos, fuertes lluvias e inundaciones generalizadas en los estados de Florida y Georgia. Incluso después de ser degradado a tormenta tropical, azotó Carolina del Sur y del Norte, inundando las principales ciudades costeras como Charleston.
En mayo, la Asociación Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos, NOAA, predijo una temporada de huracanes en el Atlántico «casi normal». Pero en agosto, pocas semanas antes de que se formara Idalia, la NOAA aumentó su pronóstico, aumentando el número de tormentas anticipadas para la temporada.
Entre 14 y 21 tormentas con nombre, con vientos de 63 km / h o más, ahora se esperan para 2023. De ellos, la agencia señaló que de seis a 11 podrían convertirse en huracanes, y de dos a cinco podrían convertirse en huracanes mayores, definidos como Categoría 3 o superior.