El expresidente Jair Bolsonaro regresó a su Brasil natal después de tres meses en Estados Unidos el jueves por la mañana. El expresidente recibió mucho apoyo, tanto en el aeropuerto de Orlando, Florida, que lo vio ir, como en Brasilia.
Bolsonaro regresó a un Brasil turbulento y dividido por los ajustados resultados de las elecciones presidenciales de octubre. Que lo vieron perder ante el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva. El máximo tribunal de Brasil, el Supremo Tribunal Federal, anuló las condenas de Lula en 2021, permitiéndole postularse para la presidencia.
Jair Bolsonaro salió de Brasil hacia Florida a fines de diciembre, días antes de que expirara su mandato presidencial. Dada la culminación de su presidencia, Bolsonaro tuvo que volver a solicitar la admisión a los Estados Unidos y, según los informes, solicitó una visa de seis meses, por lo que regresó a Brasil esta semana.
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El ultraderechista y sus aliados declararon repetidamente, sin embargo, que el expresidente no tenía intención de quedarse en Estados Unidos a largo plazo. Pero, Bolsonaro simplemente había planeado un viaje para visitar amigos y descomprimirse después de cuatro años estresantes.
«En mis cuatro años como presidente, logramos despertar muchas cosas en Brasil, entre ellas el patriotismo», afirmó Bolsonaro a su regreso
Su estancia en Estados Unidos ocurrió en un momento turbulento en su país de origen. El 8 de enero, una semana después de la tercera toma de posesión de Lula, miles de partidarios de Bolsonaro irrumpieron en las oficinas de la presidencia brasileña, el Congreso y el STF, causando una destrucción masiva de propiedades y pocos heridos.
Lula acusó de «psicópata» a Bolsonaro y de orquestar los disturbios e intentar organizar un «golpe de Estado». Bolsonaro es señalado de haber participado en la organización de la manifestación anti Lula. Los expertos legales brasileños sugieren que a su regresó a Brasil, Bolsonaro podría enfrentar problemas legales en casa como resultado de los disturbios.
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Sin embargo, Bolsonaro se enfrentará primero a un interrogatorio en un caso relacionado con el manejo de Bolsonaro de un regalo de joyas del gobierno de Arabia Saudita durante su mandato. Mientras estaba en Florida, Bolsonaro fue hospitalizado brevemente con dolor abdominal severo, una complicación derivada de un supueso intento de asesinato en 2018.
Hizo solo dos apariciones públicas importantes, una en una charla organizada por la organización conservadora Turning Point USA y un discurso en la Conferencia de Acción Política Conservadora o CPAC. Bolsonaro partió de Orlando el miércoles por la noche, atrayendo partidarios en el aeropuerto de Florida con el que pareció conversar y tomar fotos antes de su vuelo.
«Me quedé tres meses aquí, prácticamente en silencio, y he estado siguiendo todo lo que sucede en Brasil», indicó. Ahora de regresó a mi país, «comenzaremos a organizarnos y prepararnos para ayudar al país a superar sus desafíos».
Dando la bienvenida a Bolsonaro a casa estaban varios senadores conservadores, incluido su hijo Flavio Bolsonaro, quien luego lo llevó a la sede de su derechista Partido Liberal o PL. En la agenda inmediata del día hay una fiesta de bienvenida por parte del PL, Bolsonaro asumirá un papel de liderazgo honorario.
