Continúa la novela del tope de deuda

La administración de Biden advirtió que se dirige a un precipicio financiero si el Congreso no le permite pedir más prestado. Mientras, continúan las discusiones entre la casa blanca y el Congreso sobre el tope de deuda. La causa de la crisis la genera la acción de los republicanos en oposición a Biden.

Poder llegar a un acuerdo sobre el techo de la deuda pública es primordial antes de que los estadounidenses pasen hambre, según afirman los expertos.

El departamento del Tesoro norteamericano ya advirtió que podría quedar incapacitado para pagar a los empleados federales. Incluso, puede perder la capacidad de financiar programas gubernamentales a menos que el Congreso apruebe elevar su techo de deuda.

En principio se trata de subir de 1,1 billones de dólares a 1,5 billones de dólares. Aunque parece poco, la mayoría republicana en la Cámara de Representantes está exigiendo recortes al gasto público a cambio de esa luz verde.

El Congreso preguntara «¿necesitamos seguir gastando de esta manera? Porque nuestra deuda es mayor que nuestro PIB»

Mientras, el presidente, Joe Biden, un demócrata, finalmente se reunió con el presidente republicano de la Cámara de Representantes Kevin McCarthy, aunque no logró alcanzar un acuerdo sustantivo. Mitch Roschelle afirmó que la situación se convirtió en un «enfrentamiento al estilo mexicano».

«Ambas partes se atrincheraron y se niegan a ceder ni un centímetro mientras los beneficiarios del Seguro Social se preocupan de que su próximo pago no llegue», señaló. Este argumentó que gran parte del plan presupuestario del Tesoro era la liquidación inevitable de las deudas acumuladas por la administración Biden y sus predecesores.

«El uso de la orden ejecutiva hasta la saciedad por parte de esta administración, Trump e incluso la administración de Biden y Obama no tiene precedentes», indicó Roschelle. «Así que tenemos obligaciones por asignaciones pasadas que se deben y que necesitamos usar los fondos actuales del Tesoro para pagar. Se trata una obviedad. Porque, hay que pagar obligaciones que fueron legalmente apropiadas».

Roschelle también critica la negativa de Biden a negociar con el Partido Republicano que ahora controla la Cámara de Representantes. «Por otro lado, el gasto en política fiscal después de COVID está fuera de control», explica. «Hemos llegado a niveles en los billones que nunca hemos visto antes. Es casi como si hubiéramos perdido de vista el tamaño de estas sumas».

Mientras los republicanos están retrasando el aumento del techo de la deuda. El experto advirtió a la Casa Blanca contra imponerlo a través de la «medida extrema» de otra orden ejecutiva. Esto solo haría que fuese impugnada por el tribunal supremo. Lo que dejará al mercado global con la preocupación de que existe la posibilidad de que EEUU pueda incumplir sus obligaciones.

Mientras tanto, la economía está en el filo de la navaja. Mientras los bancos regionales de tamaño mediano y específicos de la industria que se declaran insolventes. Y son rescatados con fondos federales.