Primer ministro ruso anuncio renuncia de todo el gabinete

El Gobierno ruso del primer ministro Dmitri Medvédev anunció este miércoles su dimisión después de que el presidente, Vladímir Putin, anunciara una serie de cambios políticos en su discurso sobre el estado de la nación.
«Nosotros, como gobierno de la Federación de Rusia, tenemos que dar al Presidente de nuestro país los medios de tomar todas las medidas que se imponen. Es por ello (…) que el Gobierno en su composición actual presenta su dimisión», dijo Medvedev, en declaraciones retransmitidas por la televisión.
Medvédev, de 54 años, consideró «correcto» que el actual Ejecutivo presente su renuncia teniendo en cuenta los «cambios fundamentales en la Constitución de la Federación Rusa» propuestos por el jefe del Kremlin destinados a otorgar mayores poderes a la Duma o cámara de diputados.
En caso de ser aprobados, aseguró, dichas enmiendas constitucionales modificarán «el equilibrio de poder» entre el Gobierno y la Duma.
Por su parte, Putin agradeció a Medvédev su trabajo al frente del Gobierno y se mostró «satisfecho» con su gestión. «No se pudo hacer todo, pero nunca es posible hacerlo todo», agregó.
Reformas a la constitución
Vladimir Putin propuso este miércoles una serie de reformas de la Constitución para reforzar los poderes del Parlamento, aunque preservando el carácter presidencial del sistema político que dirige desde hace 20 años.
La principal medida anunciada tiende a reforzar el papel del Parlamento en la formación del gobierno, dándole la prerrogativa de elegir al primer ministro. Actualmente, la Duma confirma la elección del jefe de Estado.
Según Putin, se trata de un cambio «significativo» para el que juzga bastante «madura» a Rusia. En estos momentos, las dos cámaras parlamentarias están dominadas por fuerzas pro-Putin y no se oponen nunca a la voluntad del Kremlin.
Medvédev asumió la jefatura del actual Gobierno en mayo de 2018 después de que Putin fuera reelegido dos meses antes como jefe del Kremlin, aunque ya ejerció dicho puesto entre 2012, cuando Putin regresó al Kremlin, y principios de 2018.
La labor del primer ministro fue duramente criticada tanto por la oposición parlamentaria y extraparlamentaria como por los propios ciudadanos. Solo un 36 % aprobó su gestión en las encuestas de opinión y su dimisión fue ampliamente demandada durante los últimos años.
Medvédev sustituyó a Putin como presidente ruso (2008-2012) cuando éste tuvo que abandonar el Kremlin al ejercer dos mandatos presidenciales consecutivos, enroque muy criticado en su momento por opositores y gobiernos occidentales.