InternacionalesPetróleoPolíticaSucesosVenezuela

Gran Bretaña mete un buque en el conflicto del Esequibo

El gobierno británico anunció el envío de un buque patrullero a Guyana, que Caracas, considera una injerencia y una provocación

Un territorio en disputa desde el siglo XIX

El buque se dirige al Esequibo, una extensa zona de 159 mil kilómetros cuadrados que abarca dos tercios del territorio de Guyana, y que Venezuela reclama como parte de su soberanía desde el siglo XIX. El origen del conflicto se remonta a la época colonial, cuando el imperio español, el holandés y el británico se disputaban el control de la región. Tras la independencia de Venezuela, en 1811, el país heredó los derechos sobre el Esequibo, que fueron reconocidos por el Reino Unido, que administraba la Guayana Británica.

Sin embargo, a partir de 1835, los británicos comenzaron a ocupar ilegalmente el territorio al oeste del río Esequibo, aprovechando la debilidad y la inestabilidad política de Venezuela. En 1899, un tribunal arbitral en París, integrado por dos jueces estadounidenses, dos británicos y uno ruso, pero sin la presencia de ningún venezolano, le otorgó el Esequibo al Reino Unido, en una decisión que Venezuela consideró nula e ilegítima.

Desde entonces, Venezuela ha mantenido su reclamación sobre el Esequibo, y ha buscado una solución pacífica y negociada con Guyana, que se independizó del Reino Unido en 1966. En 1966, ambos países firmaron el Acuerdo de Ginebra, que estableció la creación de una comisión mixta para resolver el diferendo, y que reconoció la validez de la reclamación venezolana. Sin embargo, la comisión no logró ningún avance, y el conflicto se ha prolongado hasta la actualidad.

Un buque para confrontar.
El HMS Trent es un buque patrullero de la clase River, diseñado para trabajar en lo que el gobierno describe como «diplomacia de defensa».

Un escenario dónde un buque entra en confrontación

La disputa por el Esequibo se ha agudizado en los últimos años, debido al hallazgo de importantes yacimientos de petróleo y gas en la zona, que han despertado el interés de empresas transnacionales y de potencias extranjeras.

En 2015, la compañía estadounidense Exxon Mobil anunció el descubrimiento de un gran reservorio de hidrocarburos en las aguas del Esequibo, con el aval del gobierno de Guyana, que otorgó licencias de exploración y explotación a varias empresas.

Venezuela protestó por lo que consideró una violación de su soberanía, y denunció la complicidad de Guyana con Estados Unidos, su principal adversario político y económico.

El gobierno de Nicolás Maduro reafirmó su derecho sobre el Esequibo, y emitió un decreto que creó una nueva zona marítima denominada Territorio para el Desarrollo de la Fachada Atlántica, que abarca las aguas en disputa.

Asimismo, el gobierno venezolano impulsó un referéndum el pasado 3 de diciembre, en el que el 98% de los votantes se pronunció a favor de la reclamación del Esequibo.

Guyana rechazó las acciones de Venezuela, y las calificó de ilegales y agresivas. El gobierno de Irfaan Ali acusó a Venezuela de violar el derecho internacional y el Acuerdo de Ginebra, y de amenazar la paz y la seguridad de la región.

Guyana solicitó la intervención de la Corte Internacional de Justicia (CIJ), el principal órgano judicial de la ONU, para que se pronuncie sobre la validez del laudo arbitral de 1899, y sobre la soberanía del Esequibo. Venezuela se negó a participar en el proceso, al considerar que la CIJ no tiene competencia para resolver el caso.

Un desafío para la diplomacia y el diálogo

La situación del Esequibo representa un desafío para la diplomacia y el diálogo, que deben prevalecer sobre la confrontación y la violencia. El conflicto requiere de una solución pacífica y negociada, que respete el derecho internacional y el interés de ambos países.

El conflicto también demanda de una participación y una cooperación de la comunidad internacional, que debe apoyar los esfuerzos de mediación y de entendimiento, y que debe evitar la injerencia y la provocación.

En este contexto, la decisión del gobierno británico de enviar un buque patrullero a Guyana, en medio de la tensión con Venezuela, ha sido criticada por Caracas, que la considera una injerencia y una provocación.

El gobierno de Boris Johnson anunció que el buque HMS Trent visitará a su aliado y socio de la Commonwealth, como parte de una serie de actividades en la región. Sin embargo, el gobierno de Maduro denunció que se trata de un acto de hostilidad y de apoyo a las pretensiones de Guyana sobre el Esequibo.

El gobierno británico ha defendido su decisión, y ha reiterado su respaldo a Guyana, su antigua colonia, en el conflicto con Venezuela.

Gran bretaña afirma que el Esequibo pertenece a Guyana, y que el laudo arbitral de 1899 es válido y definitivo. El gobierno británico también ha cuestionado la legitimidad de Maduro, y ha reconocido al líder opositor Juan Guaidó como el presidente interino de Venezuela.

Fuente
TheGuardianBBCElDebateUSNews

Artículos relacionados

Deja una respuesta

Botón volver arriba
Translate »