Republicanos debaten sin Trump, quién domina las encuestas
Los contendientes republicanos de 2024 celebrarán un tercer debate mientras Trump vuelve a faltar al evento
Siete aspirantes a la candidatura presidencial republicana para 2024 se enfrentaron en el tercer debate, celebrado en California, en el que abordaron temas como la economía, la inmigración, la política exterior y el cambio climático. El gran ausente fue el expresidente Donald Trump, que sigue liderando las preferencias de los votantes conservadores.
Un debate sin brillo ni sorpresas
El debate, organizado por el Instituto Reagan y la cadena Fox News, tuvo lugar el pasado 8 de noviembre en el Centro Presidencial Ronald Reagan, en Simi Valley, California. Los participantes fueron los senadores Ted Cruz, Tom Cotton y Josh Hawley, los gobernadores Kristi Noem y Greg Abbott, el exsecretario de Estado Mike Pompeo y la exembajadora ante la ONU Nikki Haley.
Los candidatos coincidieron en criticar la gestión del presidente Joe Biden, al que acusaron de debilitar la economía, la seguridad y el liderazgo de Estados Unidos. También defendieron sus propuestas en materia de impuestos, comercio, fronteras, defensa, salud y energía, sin entrar en grandes confrontaciones ni diferencias ideológicas.
El debate no tuvo el brillo ni las sorpresas de los anteriores, en los que destacaron las intervenciones de Ron DeSantis, el gobernador de Florida, que se perfila como el principal rival de Trump. DeSantis, que no asistió al debate por motivos de agenda, se ha posicionado como el heredero del trumpismo, con un discurso populista, nacionalista y antiestablishment.
Republicanos a la sombra de Trump
El expresidente Donald Trump, que no ha confirmado ni descartado su intención de presentarse a las elecciones de 2024, fue el gran ausente del debate. Sin embargo, su presencia se hizo notar en varias ocasiones, tanto por las preguntas de los moderadores como por las referencias de los candidatos.
Algunos de los participantes, como Cruz, Cotton, Noem y Pompeo, elogiaron la gestión de Trump y se mostraron leales a su legado. Otros, como Haley, que fue una de las primeras en romper con el expresidente tras el asalto al Capitolio del 6 de enero, se mostraron más críticos y distantes, y abogaron por renovar el partido y mirar al futuro.
La sombra de Trump se proyecta también sobre las encuestas, que le sitúan como el favorito indiscutible entre los votantes republicanos. Según una encuesta de la Universidad de Quinnipiac, realizada entre el 28 de octubre y el 1 de noviembre, Trump cuenta con el apoyo del 58% de los republicanos, seguido por DeSantis, con el 15%, y Haley, con el 6%. El resto de los candidatos no superan el 3%.
El próximo debate republicano tendrá lugar el 6 de diciembre en Alabama, otro estado de fuerte tradición conservadora. Se espera que Trump vuelva a declinar la invitación, y que siga haciendo campaña por su cuenta, con mítines multitudinarios y mensajes incendiarios, que le mantienen en el centro de la atención mediática y política.
