Texas envía migrantes a la casa de Kamala Harris

Alrededor de 50 migrantes más descendieron este sábado de un autobús a metros de la residencia de la vicepresidenta Kamala Harris en Washington, D.C., informaron fuentes locales.
En el mismo momento, otros tres autobuses llegaron a la ciudad de Nueva York.
En ambos casos, fueron enviados por el gobernador de Texas Greg Abbott como respuesta a la crisis migratoria que enfrenta su estado, con miles de personas que ingresan semanalmente desde México en busca de asilo.
De esta manera, Abbott continúa presionando a las denominadas «ciudades santuario» demócratas en medio de una oleada de migrantes que siguen cruzando la frontera sur.
El autobús que arribó esta mañana a la capital estaba cargado en su mayoría de venezolanos, entre ellos un bebé de un mes de edad.
Los trabajadores humanitarios estaban preparados para recibir el autobús y llevaron rápidamente a los migrantes a un refugio local.
La llegada de los autobuses de esta mañana se enmarca en una crisis que se ha intensificado en las últimas semanas, con estados republicanos del sur que presionan al gobierno de Joe Biden para que adopte medidas que impidan o limiten el ingreso de personas.
Texas, Florida y Arizona, entre otros, denunciaron que la crisis migratoria les está causado serios problemas presupuestarios por el mantenimiento de miles de personas, por políticas que consideran de «fronteras abiertas» aplicadas por el gobierno demócrata.
La vicepresidente Kamala Harris recibió la tarea de enfrentar la «raíz» que provoca la actual espiral migratoria.
Harris expresó que la situación estaba «segura», declaración que generó una oleada de críticas desde diferentes sectores, en particular, un fuerte rechazo por parte de los agentes de la Patrulla Fronteriza, que alegan que está «lejos de ser segura».
Dos autobuses llegaron por primera vez el jueves al Observatorio Naval de Washington, donde viven Harris y el segundo caballero Doug Emhoff.
Harris acusó a los gobernadores republicanos de una «denegación del deber» en una entrevista con Vice News, y Emhoff calificó a los traslados de «vergonzosos».
Mientras tanto, en Massachusetts, los migrantes enviados a Martha’s Vineyard por el gobernador de Florida, Ron DeSantis, fueron reubicados el viernes a la Base Conjunta de Cape Cod, donde el gobernador Charlie Baker ha creado un refugio.
Las llegadas han provocado una fuerte reacción de la Casa Blanca. La secretaria de prensa Karine Jean-Pierre acusó a los gobernadores republicanos de tratar a los migrantes «como bienes de mobiliario».
Otros, en cambio, dijeron que los traslados de migrantes han expuesto «la hipocresía» de los demócratas que apoyan las políticas de las ciudades santuarios.